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Hasta el 40% de los síncopes no tienen causa definida después de una intensa investigación etiológica, por lo que se clasifican como síncope de origen inexplicable. La pregunta que se impone en este momento es: El tilt test es un buen examen para determinar la etiología de esos síncopes inexplicados?
Los pacientes con historia típica de síncope vasovagal tienen un tilt test con respuesta positiva en hasta el 92% de los casos. Los individuos sin antecedentes de síncope tienen un tilt test positiva en apenas el 13% de las veces. Pero y aquellos pacientes con síncope de origen inexplicable? En esta población específica, el tilt test es positivo en sólo el 36% de los casos. Por otro lado, la positividad del tilt test en pacientes con síncope sabiamente de origen cardiaco es de hasta 47%. En otras palabras, el valor diagnóstico de este examen complementario es malo cuando más se necesita de él.
Comentario de Cardiopapers: La historia clínica sigue siendo la principal herramienta para determinar la causa de un síncope. Cuando asociamos a ella un buen examen físico, con determinación de la presión arterial en la posición supina y ortostática, y un electrocardiograma de reposo conseguimos definir su etiología en la mayoría de los casos.
El raciocinio aquí es muy diferente del empleado en la investigación de dolor torácico crónico. En este escenario, el gran papel de los exámenes no invasivos como Test ergométrico y cintilografía miocárdica es justamente en los pacientes con probabilidad pre-test intermedia. En el escenario de síncope, como se mencionó anteriormente, si solicitamos el tilt test en un paciente con síncope inexplicado (al principio, una probabilidad moderada de tener un sincope vasovagal ya que esta es la principal causa de síncope en general), los resultados pueden confundirnos más que ayudarnos. Es como lanzar una moneda hacia arriba.
